Con diseño en forma de puro negro, tres anillos de oro y plumín artesano de oro, la pluma estilográfica Meisterstück se ha convertido en sinónimo de Montblanc al ser su producto más distintivo. Para festejar el siglo de vida de este símbolo global del mundo de la escritura que se presentó en 1924, la marca ha colaborado con el director y guionista estadounidense Wes Anderson para crear campaña que transporta a los espectadores a mundo extraordinario a través de la mirada del cineasta.
La historia, protagonizada por los actores Rupert Friend, Jason Schwartzman y el propio Wes Anderson, presenta a tres pintorescos personajes en una sede central de Montblanc ficticia en la cima del Mont Blanc. Allí, cuentan la historia de la Maison y de su creación más famosa, con el estilo distintivo de Anderson, que aúna su peculiar estética visual con narrativa excéntrica y poco convencional. Para celebrar por todo lo alto la colaboración con Anderson y el aniversario de la Meisterstück, las iniciativas de marketing de Montblanc durante este año del centenario se empaparán de las influencias de esta nueva campaña.
“Durante todo un siglo, la Meisterstück ha plasmado millones de historias creadas por autores, artistas y escritores de lo cotidiano. Era el momento de darle el protagonismo que se merece a este icono de la escritura, pero queríamos hacerlo de manera completamente sorprendente e inesperada. Por este motivo, le propusimos a Wes Anderson, uno de los cineastas más importantes de nuestro tiempo, que brindase su toque único al mundo de la famosa marca a través de su inimitable narrativa y su inconfundible identidad visual. Sin duda, es manera totalmente distinta de presentar a nuestra Maison, pero estamos deseando que el público nos vea con nueva luz”, explica Vincent Montalescot, Chief Marketing y Merchandising Officer de Montblanc.
La película está repleta de sofisticadas frases ingeniosas y sutiles referencias, y no tan sutiles, al ADN de la Maison y sus símbolos: el paisaje de la montaña en la primera escena es alusión al nombre de la compañía y a su emblema —la cima nevada del Mont Blanc—; la ficticia Biblioteca Alpina del Observatorio de Montblanc es guiño a la reciente campaña “El espíritu de la biblioteca”, que hace hincapié en el poder inspirador de las bibliotecas y la conexión de Montblanc con el universo de las palabras, y el escritorio encarna el rincón donde surgen la magia de la escritura y la creatividad.
Aunque los personajes hablan de la “pluma estilográfica diseñada hace un siglo para los viajeros en busca de aventuras” y discuten acerca de su carácter pionero e innovador, la Meisterstück no es el único producto que aparece en la película. Los relojes y los artículos de piel también hacen aparición especial que refleja la presencia de la marca en múltiples categorías.
Mientras están sentados en un escritorio de la sala de escritura, los personajes plasman sus palabras en papel para recordar a los espectadores lo maravillosa y valiosa que es la escritura a mano, ya sea entrada en el diario, carta o, incluso, novela. Durante la animada conversación, los protagonistas mencionan de forma ingeniosa las distintas campañas y eslóganes de la marca, e invitan a los espectadores a redescubrir la experiencia de la escritura a mano: “pongámonos a escribir”.
Para dar vida a su visión, Anderson contó con la participación de sus colaboradores creativos habituales: Roman Coppola, productor y codirector; Jeremy Dawson y John Peet, productores; Stephan Gessler, supervisor de la dirección artística, y el ganador de un Óscar Linus Sandgren, director de fotografía.
Además de esta película, Rupert Friend, la actriz estadounidense Maude Apatow, el actor y diseñador indioestadounidense Waris Ahluwalia, el actor coreano y Montblanc Mark Maker Lee Jinuk y el actor chino y embajador de la marca global Jing Boran están presentes en esta reinterpretación del universo de la marca en serie de campañas fotográficas de Charlie Gray, así como en varios vídeos cortos.